Abandona la idea de que alguna vez vas a terminar. Pierdes el tiempo si quieres llegar a las 400 páginas escribiendo solo una página al día. Luego, un día terminas, y entonces te sorprende.
Escribe libremente y lo más rápido posible y échalo todo. Nunca corrijas o reescribas hasta que todo esté escrito. La reescritura durante el proceso de escritura suele ser una excusa porque no tienes ideas. Además interfiere con el flujo y el ritmo de escritura.
Olvídese de su audiencia generalizada. La audiencia es un solo lector. He descubierto que a veces ayuda elegir a una persona: una persona real que conoces o una persona imaginada.
Si una escena o una sección se apodera de ti y no avanzas, evítela y continúa. Cuando hayas terminado el conjunto, vuelve a ella y encontrarás la razón por la que te dio problemas. Seguramente es porque no pertenecía allí.
Ten cuidado con una escena que se vuelve demasiado querida para ti. Por lo general, se encontrará que está fuera de dibujo.
Si está utilizando el diálogo, dígalo en voz alta mientras lo escribe. Solamente entonces tendrá el sonido del habla.
